Se conoce bajo esta expresión el debate que durante finales del siglo XVIII y comienzos del XIX se llevó a cabo teniendo como eje central el problema de los sexos y, más concretamente, los esfuerzos realizados para que la mujer fuera considerada como sujeto de pleno derecho y a todos los efectos. La producción de obras que giraron en torno a la cuestión de la mujer desviaron el fondo del debate hacia el feminismo, dejando pendiente la cuestión central como cuestión de los sexos y no sólo de los problemas de uno de los dos.

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Post-feminismo